A 175 Aí‘OS DE LA OCUPACIí“N ILEGAL BRITíNICA DE LAS ISLAS MALVINAS, EL GOBIERNO ARGENTINO RATIFICA SU SOBERANíA SOBRE LAS ISLAS MALVINAS, GEORGIAS DEL SUR Y SANDWICH DEL SUR Y LOS ESPACIOS MARíTIMOS CIRCUNDANTES
El 3 de enero de 1833 fuerzas británicas ocuparon las Islas Malvinas, desalojando por la fuerza a sus habitantes y a las autoridades argentinas allí establecidas legítimamente. El acto de fuerza de 1833 fue inmediatamente protestado y nunca consentido por la República Argentina.
Hoy, a 175 años de esa ocupación ilegítima que aún persiste, el Pueblo y el Gobierno argentinos reafirman una vez más los imprescriptibles derechos de soberanía de la República Argentina sobre las Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur y los espacios marítimos circundantes, que son parte integrante del territorio nacional argentino.
Asimismo, recuerdan el objetivo permanente e irrenunciable, consagrado en la Constitución Nacional, de recuperar el ejercicio pleno de la soberanía sobre los mencionados territorios y espacios marítimos, conforme a los principios del derecho internacional y respetando el modo de vida y los intereses de los habitantes de las Islas Malvinas. Este objetivo permanente constituye una política de Estado y responde a un anhelo colectivo del Pueblo de la Nación Argentina.
El Gobierno argentino reitera la necesidad de cumplir con las múltiples resoluciones de la Organización de las Naciones Unidas y declaraciones de la Organización de Estados Americanos, entre otros numerosos foros, que instan a los Gobiernos de la República Argentina y del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte a reanudar las negociaciones bilaterales a fin de encontrar, a la mayor brevedad posible, una solución justa, pacífica y duradera a la disputa de soberanía.
En el entendido de que la cooperación sobre aspectos prácticos contribuiría a crear el clima propicio para reanudar las negociaciones tendientes a la solución de la disputa, la Argentina adoptó con el Reino Unido entendimientos bilaterales bajo fórmula de salvaguardia de soberanía. No obstante, la renuencia británica a abordar la cuestión de la soberanía continúa y, asimismo, se han multiplicado los actos unilaterales británicos, los que no sólo no contribuyen a la cooperación bilateral sino que, además, contrarían el pedido de las Naciones Unidas de no adoptar medidas unilaterales.
Dichos actos unilaterales llevaron a que el Gobierno argentino diera por terminada, en marzo de 2007, la Declaración Conjunta sobre hidrocarburos y que la Comisión de Pesca del Atlántico Sur no haya vuelto a reunirse desde diciembre de 2005. La Argentina y el Reino Unido deberían analizar conjuntamente todos los entendimientos bilaterales a la luz de su propósito, que es el de contribuir a crear el clima propicio para la reanudación de las negociaciones sobre soberanía. En la medida en que el Reino Unido se mantenga renuente a hacerlo, la Argentina continuará compelida a hacer dicho análisis sin la participación de su contraparte.
La República Argentina considera injustificada la negativa británica a abordar la cuestión de fondo para poner fin a esta anacrónica disputa de soberanía cuya existencia, naturaleza y vigencia es reiterada y expresamente reconocida por la comunidad internacional, incluyendo al propio Reino Unido. Para poder dar cumplimiento a los numerosos pronunciamientos de la comunidad internacional que instan a ambas partes a ponerle fin, la República Argentina reitera, una vez más, su permanente disposición a reanudar las negociaciones bilaterales tendientes a la solución de la disputa de soberanía.