Los BRICS dispuestos a crear su propia agencia de calificación
Rusia ha propuesto a sus socios crear una agencia de calificación única que compita con las tres principales agencias: Standard & Poor’s, Moody’s y Fitch. A esta conclusión llegaron los participantes de una reunión con el vice primer ministro del gobierno de Rusia, Ígor Shuválov.
“En primer lugar, estamos hablando de nuestros socios tradicionales, como los BRICS y la Comunidad Económica Euroasiática. Todos los países de los BRICS ya poseen compañías de calificación en sus países y se trata sobre todo del reconocimiento mutuo. Nuestros socios extranjeros pueden ofrecer su asistencia en el terreno de la alineación de los estándares y los mecanismos de observación y, lo más importante, del reconocimiento mutuo de las calificaciones”, comenta a RBTH Konstantín Korischenko, director del departamento de mercados de valores e ingeniería financiera de la Academia Rusa de Economía Nacional y Administración Pública de la presidencia y uno de los asistentes de la reunión con Shuválov.
En particular, según fuentes del periódico RBC Daily, la nueva agencia podría crearse en base a la cooperación de la agencia de calificación rusa RusRating y la china Dagong Global. A ellas podría unirse la estadounidense Egan-Jones Ratings, que sueña desde hace tiempo con desbancar a las tres agencias líderes.
Es más, la compañía Dagong Global ya comenzó las negociaciones con RusRating en Pekín durante un encuentro de los BRICS: la compañía propuso comenzar a negociar la creación de una nueva agencia internacional de calificación basada en los países de los BRICS.
Según Mijaíl Kuzmín, analista de Investkafe, a día de hoy Dagong Global tiene representación mayoritariamente en un ámbito nacional, aunque elabora calificaciones soberanas para varios países.
Por su parte, la estadounidense Egan-Jones Ratings elabora calificaciones generalmente sobre estructuras de deuda, entre ellas emisiones de bonos, créditos bancarios, etc.
Según señala el vicedirector del departamento de análisis y gestión de riesgos de UFS IC, Vadim Vedérnikov, ambas agencias son conocidas desde hace tiempo por su trabajo de calificación con emisores corporativos y soberanos, ya que operan en mercados de crédito “candentes” como China y Estados Unidos.
Al proyecto de la agencia única ya se le ha llamado Universal Credit Rating Group. “Las calificaciones que Universal Credit Rating Group podría comenzar a elaborar para las compañías rusas podrían obtener en los ámbitos de inversión extranjeros un reconocimiento equiparable al de las tres principales compañías de calificación estadounidenses”, – opina Vedérnikov.
Soluciones alternativas
Otra solución es la cooperación con ARC Ratings (un consorcio internacional de agencias de Portugal, India, Sudáfrica, Malasia y Brasil). “La cooperación con esta agencia podría ser un factor positivo para cualquier agencia rusa, ya que permitiría dar una valoración alternativa, objetiva e independiente, a las calificaciones de las compañías rusas además de las calificaciones de Universal Credit Rating Group”, comenta Vadim Vedérnikov.
Los expertos creen que entre los posibles socios se encuentran también la japonesa Japan Credit Rating Agency y la canadiense Dominion Bond Rating Service. Según Vedérnikov, estas organizaciones de calificación, creadas en base a los vínculos con agencias rusas, podrían llevar a cabo un trabajo eficaz para las compañías rusas. Estas calificaciones podrían ser más objetivas y, por tanto, mejorar la reputación de los emisores rusos a los ojos de los inversores extranjeros.
La rebaja de la calificación de S&P podría afectar seriamente a la economía rusa. Según Mijaíl Kuzmín, “una rebaja de la calificación de un país sirve como indicador para los inversores de distintos países sobre el empeoramiento de la situación económica y el aumento de riesgos de inversión en compañías de dicho país”, comenta el experto.
Por tanto, la fuga de capitales, que en el primer trimestre ascendió a 50.600 millones de dólares, podía no reducirse durante el segundo trimestre de 2014.
Es más, seguramente aumente el coste de los préstamos a Rusia y a cualquier compañía rusa en los mercados extranjeros.
“En las condiciones actuales, cada vez es más importante la presencia en la infraestructura financiera rusa de sus propias agencias nacionales de calificación. En Rusia existen este tipo de compañías, pero estas deben desarrollarse”, aclara Konstantín Korischenko. Antón Soroko, analista del consorcio de inversión FINAM, cree que las agencias de calificación extranjeras intentan de manera legítima centrar la atención de la sociedad mundial en los crecientes riesgos de la inversión en la economía rusa, aunque podrían estar exagerando un poco la realidad.
“En la escena internacional, en este sector se está formando un monopolio. En esta situación, el desarrollo de evaluadores alternativos favorecerá a largo plazo no sólo a Rusia, sino a todo el mundo”, asegura.