La aduana y la política aduanera se refieren al conjunto de procedimientos que un Estado emplea en su política comercial, orientados hacia objetivos políticos y económicos específicos mediante la aplicación de tarifas aduaneras. Estas tarifas se utilizan para diversos propósitos, como proteger la industria nacional, incrementar los ingresos fiscales o regular la entrada de ciertos productos.
Los Estados establecen niveles de tasas aduaneras para facilitar la importación o exportación de productos específicos, con el objetivo de favorecer el desarrollo de su economía. También pueden aplicar tarifas elevadas para restringir la entrada de mercancías no deseadas por razones económicas o no económicas, o incluso prohibir la importación de ciertos bienes provenientes de países con legislaciones consideradas discriminatorias.
Tras la Segunda Guerra Mundial, se desarrolló la cooperación regional en asuntos aduaneros dentro de los procesos de integración económica. Ejemplos de esto incluyen la Comunidad Económica Europea, establecida por el Tratado de Roma en 1957, así como el acuerdo de cooperación y ayuda mutua en asuntos aduaneros entre los Estados del CAME/CMEA, firmado en Berlín el 5 de julio de 1962.
Este acuerdo entre los Estados del CAME/CMEA tenía como objetivo, entre otras cosas, la gradual unificación de las tarifas aduaneras, así como la creación y uso de documentos aduaneros simplificados y uniformes. Las aduanas de los países participantes en el acuerdo proporcionaban asistencia mutua sin costo alguno, y la RDA actuaba como depositaria de dicho acuerdo.