Continuación de los estudios sobre el éxodo rural (Décima Conferencia Interamericana, Caracas – 1954)

La Décima Conferencia Interamericana,

Considerando:

La importancia de los problemas derivados del éxodo rural y sus efectos sobre el desarrollo económico y el bienestar social de los países americanos;

La conveniencia de proseguir e intensificar los estudios que acerca de dicho fenómeno demográfico y social ha iniciado ya la Unión Panamericana, de acuerdo con la resolución 14, adoptada en la Tercera Sesión Extraordinaria del Consejo Interamericano Económico y Social;

La necesidad impostergable de proteger a la población campesina, especialmente en lo que se refiere a salubridad, régimen de propiedad rural, educación y asistencia social; y

Que las migraciones internas y externas de la población en el Continente crean problemas en el ámbito nacional e internacional que afectan los derechos humanos, el desarrollo económico y el bienestar social de varios países americanas,

Recomienda:

1. Que los gobiernos americanos procedan a estudiar los problemas relacionados con el éxodo rural y tomen medidas para resolverlos adecuadamente y, al mismo tiempo, presten su colaboración entusiasta a la Unión Panamericana, en los trabajos que emprenda respecto a dicho problema.

2. Que el Consejo Interamericano Económico y Social solicite de la Unión Panamericana que, al estudiar específicamente el problema del éxodo rural, considere los medios más eficaces, incluyendo los recursos técnicos y financieros correspondientes, para obtener información sobre los puntos siguientes:

a) Las causas y los efectos de los desplazamientos de la población rural y las formas de encauzarlos adecuadamente hacia los fines del desarrollo económico y el bienestar social de cada país;

b) Las necesidades de salubridad, asistencia social, educación, vivienda y otros servicios, y los medios de proveerlos no sólo en zonas rurales, sino en las ciudades donde la afluencia de inmigrantes rurales constituye una carga para los organismos públicos y privados;

c) Las necesidades de potencial humano y los programas que den cabida a un plan organizado de reclutamiento, selección, adiestramiento y colocación de trabajadores; y

d) Los sistemas de producción de la tierra y la distribución de la propiedad rural en los países del Continente.

3. Que el Secretario General de la Organización de los Estados Americanos siga investigando, en colaboración con los organismos especializados interamericanos, la forma de lograr una contribución más eficaz al desarrollo de servicios indispensables en las zonas rurales.

4. Que la Unión Panamericana, en su estudio sobre el éxodo rural, considere la experiencia y la información disponible que faciliten la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y otros organismos de las Naciones Unidas interesados en este problema y aproveche también la experiencia de los organismos no gubernamentales en este mismo campo.

5. Que el Consejo Interamericano Económico y Social, a medida que las posibilidades de recursos técnicos y financieros de la Unión Panamericana lo permitan, encomiende a esta organización que realice estudios e investigaciones generales y específicas en materia de migración, en estrecha colaboración con los gobiernos interesados y los organismos especializados de las Naciones Unidas.