El Comité Especial de Descolonización de la ONU reafirmó este lunes “el derecho inalienable del pueblo puertorriqueño a la libre determinación y la independencia”, de conformidad con la resolución 1514 de la Asamblea General, que versa sobre la independencia a los países y pueblos coloniales.
En una resolución adoptada por consenso, el Comité Especial exhorta nuevamente al Gobierno de Estados Unidos a asumir la responsabilidad de propiciar un proceso que permita a Puerto Rico tomar de manera soberana decisiones sobre sus necesidades económicas y sociales urgentes.
Promovido por Cuba, Nicaragua, Venezuela, Ecuador, Rusia y Siria el texto se sumó a las 36 resoluciones y decisiones sobre Puerto Rico adoptadas por el Comité a partir de 1972.
Huracanes Irma y María
Este año, el documento destaca la devastación causada por el paso de los huracanes Irma y María en 2017, que agudizaron el desempleo, la marginación y la pobreza, además de agravar los problemas relacionados con la educación y la salud.
La resolución pide a la Asamblea General que examine ampliamente la cuestión de Puerto Rico y se pronuncie sobre ella lo más pronto posible.
Del mismo modo, insta a Estados Unidos a garantizar al pueblo puertorriqueño la protección de sus derechos humanos y a que le devuelva el territorio ocupado por sus fuerzas militares, en particular el de las instalaciones de Vieques y Ceiba, donde también le conmina a asumir los costos de limpieza y descontaminación.
Por otra parte, expresa preocupación por las acciones contra independentistas y llama a investigarlas rigurosamente.
Como en años anteriores, a la sesión del Comité Especial de Descolonización acudieron decenas de organizaciones, instituciones y fuerzas políticas y sociales puertorriqueñas e internacionales para expresar su apoyo a la isla y debatir sobre la cuestión.
Líder independentista
Oscar López Rivera, el líder independentista que permaneciera casi 36 años en una prisión de Estados Unidos por cargos que incluían conspiración sediciosa y tráfico de armas, entre otros, asistió a la sesión del Comité por segunda vez para denunciar las políticas de ese país que, considera, están diseñadas para erradicar la identidad de los puertorriqueños.
López Rivera, sentenciado a 70 años de cárcel, fue liberado el año pasado por el entonces presidente estadounidense, Barak Obama.