CPI condena a 9 años de prisión a destructor de patrimonio histórico y religioso en Timbuktú
27 de septiembre, 2016 — La Corte Penal Internacional (CPI) condenó hoy a 9 años de prisión a Ahmad Al Faqi Al Mahdi por la destrucción de edificios religiosos y monumentos históricos en la ciudad de Timbuktú, en Mali.
Al Mahdi, el primer individuo procesado por crímenes de guerra relacionados con la destrucción de patrimonio de la humanidad, cometió esos atropellos en junio y julio de 2012. La sentencia de los jueces fue unánime.
Detenido en septiembre de 2015 por orden de la CPI, Al Mahdi se declaró culpable en la primera sesión del juicio, el pasado 22 de agosto.
En esa ocasión, admitió haber participado activamente en la demolición de diez monumentos (nueve mausoleos y una mezquita) en Timbuktú y aseguró estar arrepentido del daño causado a los malienses con sus acciones.
Los magistrados señalaron que Al Mahdi fue uno de los coordinadores y ejecutores del ataque al sitio.
Detallaron que supervisó las operaciones y determinó en qué orden debían destruirse los monumentos, ocupándose de la logística y justificando la agresión en entrevistas con medios de comunicación.
Los jueces explicaron que la sentencia se determinó tomando en cuenta la gravedad del crimen y la atenuante de haber aceptado su responsabilidad.
Al conocer la decisión de la CPI, la directora general de la UNESCO, Irina Bokova, afirmó que se trata de un hito porque reconoce la importancia de la herencia cultural no sólo en las comunidades directamente afectadas sino en la humanidad.
Además, dijo, apoya la convicción de la UNESCO de que el patrimonio cultural tiene un papel crucial en la reconstrucción y la construcción de la paz.