17 de agosto, 2016 — El Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos lamentó hoy que las autoridades de India y Pakistán no hayan permitido el acceso de observadores de Naciones Unidas a las zonas de Jamu y Cachemira, para verificar una serie de denuncias recientes sobre violaciones de las garantías fundamentales.
En la actualidad, India administra una zona de Jamu y Cachemira y Pakistán, una de Cachemira.
Zeid Ra’ad Al Hussein indicó en un comunicado que desde julio ha estado en contacto con las autoridades de ambos países tratando de conseguir el permiso para que un equipo de expertos visite esa región.
“Dada la gravedad de las denuncias de uso excesivo de la fuerza e indicaciones de violencia auspiciada por los gobiernos, además de la cantidad de personas que han muerto, los numerosos heridos y los reportes diarios de violencia en la región, es deplorable que nuestros intentos de evaluar los hechos hayan fracasado”, apuntó Zeid.
El Alto Comisionado insistió en su solicitud de acceso irrestricto para entrevistar a la población afectada, a víctimas, testigos, elementos de las fuerzas de seguridad y demás actores que puedan aportar información relevante.
Finalmente, Zeid advirtió que si las autoridades indias y paquistaníes continúan negando la entrada a los observadores, la situación de los derechos humanos en esa zona puede empeorar.
De acuerdo con despachos de prensa, el pasado 8 de julio fue muerto un independentista en la Cachemira india, lo que generó una ola de protestas que continúan y se han convertido en enfrentamientos entre los manifestantes y las fuerzas de seguridad con un saldo indeterminado de muertos y heridos.
Desde la partición de la India, ese país y Pakistán se disputan la región de Cachemira, un territorio por el que han librado varias guerras.