ONU alarmada por brutales violaciones del derecho internacional humanitario

ONU alarmada por brutales violaciones del derecho internacional humanitario

01 de noviembre, 2015 — El Secretario General de la ONU, Ban Ki-moon, instó a la comunidad internacional a poner fin al cruel desprecio por la vida humana que reflejan los crecientes ataques deliberados contra civiles en todo el mundo y solicitó un mayor compromiso de los Estados miembros de llevar a los responsables de esos ataques ante la justicia.

Desde Afganistán a la República Centroafricana, de Ucrania a Yemen, los combatientes y los que los controlan desafían la mayoría de las reglas básicas de la humanidad. Cada día, los civiles – mujeres, hombres y niños – son heridos o asesinados, torturados y secuestrados.

“Cada hora, a la gente que se encuentra en situaciones extremas se les niega la atención médica, los alimentos, el agua y el refugio que necesitan para sobrevivir, dijo Ban en Ginebra en una conferencia conjunta con Peter Maurer, presidente del Comité Internacional de la Cruz Roja.

El Titular de la ONU dijo que los ataques aéreos están aumentando en las zonas pobladas sitiadas y citó la muerte de decenas de personas el viernes cuando las fuerzas gubernamentales sirias dispararon contra un mercado en Douma.

“Esos ataque contra civiles y zonas civiles es una clara violación del derecho internacional. La continuación de la violencia es una clara indicación de que se necesita desesperadamente una solución política al conflicto en Siria – la lucha debe detenerse ahora.”, dijo Ban.

EL Secretario General dijo que el ataque a un hospital yemení en Saada la semana pasada constituyó el número 39 a un centro de salud desde marzo y añadió que más niños pueden morir en Yemen por falta de atención médica y medicamentos que por las balas y las bombas.

También condenó el bombardeo del hospital de Médicos Sin Fronteras a principios de este mes en Kunduz, Afganistán y dijo que el supuesto ataque quirúrgico “en realidad destruyó una sala de cirugía”.

Ban advirtió que estas violaciones se han vuelto tan rutinarias que se corre el riesgo de que la gente piense que el bombardeo deliberado de civiles, los ataques contra los trabajadores humanitarios y de salud, y los ataques a escuelas, hospitales y lugares de culto son resultados inevitables del conflicto.