La susodicha Comisión, constituida de acuerdo con el Artículo 30 de la Convención sobre la Carretera Panamericana (suscrita en la Conferencia Interamericana de Consolidación de la Paz, Buenos Aires, 1936), e integrada por los representantes de tres gobiernos ratificadores de la Convención (conformemente a lo dispuesto en el precitado articulo), se halló encargado de estudiar los problemas relacionados con la pronta terminación de la Carretera Panamericana, y de someter—dentro de un período de seis meses contados a partir de la fecha de su constitución—para la consideración de los varios gobiernos, un informe detallado y un plan que facilitaría la solución de dichos problemas. En cumplimiento de una recomendación hecha por el Consejo Directivo de la Unión Panamericana el día 9 de marzo de 1938, los tres miembros de la Comisión fueron designados por los Gobiernos de México, Nicaragua y los Estados Unidos.
En su informe fechado el 26 de octubre del mismo año, la Comisión dejó consignado un cálculo de los gastos necesarios para el completa miento de una determinada parte de la Carretera Panamericana, es decir, la que se extiende desde los Estados Unidos hasta la ciudad de Panamá; y solicitó a los diversos gobiernos que hicieran observaciones y sugestiones con respecto al modo de financiar la terminación de las secciones incompletas. En el informe del 23 del mes siguiente, la propia Comisión sugirió algunos métodos de financiar la pronta construcción de la Carretera. Este segundo informe se sometió a los distintos gobiernos, a la Octava Conferencia Internacional Americana (Lima, 1938), y al Tercer Congreso Panamericano de Carreteras (Santiago, 1939; véase supra, Apéndice A, núm. 35). La Octava Conferencia recomendó en su resolución LIX (supra, pág. 66) que los ya referidos gobiernos transmitiesen a la Unión Panamericana, para información de la Comisión, los datos, observaciones, etc., que estimaran necesarios, “sobre la manera más eficaz de conseguir los fondos para la construcción de la Carretera Panamericana.” En la misma resolución, se solicitó al próximo Congreso Panamericano de Carreteras (el Tercero) que transmitiese a la Unión Panamericana, para conocimiento de la Comisión Financiera, sus recomendaciones respecto de los diversos planes propuestos ya. En el último artículo de dicha resolución, la Conferencia indicó que la Comisión debía completar sus estudios a fin de formular recomendaciones específicas con la mayor prontitud posible, una vez recibidos los comentarios de los gobiernos y los del Tercer Congreso de Carreteras. Al año siguiente, este Congreso señaló el método que más favorecía entre los varios planes sugeridos, y recomendó a la Comisión Financiera la adopción de determinados principios. La Comisión preparó, sobre la base de las observaciones hechas por el Congreso de Carreteras, un tercer informe, con fecha de 15 de febrero de 1940, en el cual propuso la creación de una “ Institución Financiadora.” Dicho informe ha sido transmitido a los Gobiernos americanos, pero todavía no está organizada la propuesta Institución.
En cambio, la construcción de las secciones nacionales de la Carretera adelanta rápidamente, debido a las actividades independientes de los varios gobiernos así como a los arreglos bilaterales concluidos entre los Estados Unidos y ciertos países latinoamericanos. En diciembre de 1941, el Congreso de los Estados Unidos autorizó la asignación de $20.000.000 para completar las secciones centroamericanas de la Carretera, a condición de que cada una de las Repúblicas interesadas asumiese un tercio del costo calculado. En noviembre del mismo año, el Export-Import Bank (Banco de Exportaciones e Importaciones) de Washington abrió un crédito a favor de México a fin de facilitar la terminación, por este país, de la sección entre su capital y la de Guatemala. La asignación de dichas sumas debe dar por resultado la terminación de la Carretera Panamericana entre los Estados Unidos y Panamá, hecho que, aunado a los amplios programas de construcción que van desarrollándose en los países de la América del Sur, permitirá que más de dos terceras partes de la distancia desde Washington hasta Buenos Aires se hagan transitables durante todo el año.
Obras a consultar: Para la precitada Convención de la Conferencia de Consolidación de la Paz, véase: Conferencias Internacionales Americanas, 1889-1936 . . . (Washington, 1938), pág. 615. Informe de la Comisión Financiera de la Carretera Panamericana Nombrada de acuerdo con la Convención sobre la Carretera Panamericana, suscrita en la Conferencia Interamericana de Consolidación de la Paz (Unión Panamericana, Washington, D. C.). Planes Sugeridos para Financiar la Carretera Panamericana: Informe de la Comisión Financiera de la Carretera Panamericana Nombrada de acuerdo con la Convención . . . (Unión Panamericana, Washington, D. C.). Unión Panamericana, “Serie sobre Congresos y Conferencias,” No. 42, Medidas Adoptadas por la Unión Panamericana para Llevar a Efecto las Resoluciones Aprobadas por la Octava Conferencia Internacional Americana y Ciertas Convenciones y Resoluciones de Otras Conferencias Interamericanas: Informe Presentado a los Miembros del Consejo Directivo por el Director General, Octubre, 1942 (Washington), pág. 19. “America’s Burma Road,” por Hubert Herring, The Inter-American Monthly, octubre de 1942, pág. 10.