Convocada por el Gobierno de los Estados Unidos de América, en cumplimiento de dos resoluciones aprobadas por la Sexta Conferencia Internacional Americana (La Habana, 1928).
Países representados: Todas las Repúblicas americanas estuvieron representadas oficialmente en la Conferencia Interamericana de Agricultura.
Dicha Conferencia aprobó una Acta Final en la que estaban incluidas resoluciones sobre las siguientes materias: abreviación del nombre de la Conferencia, cuya forma original era, “Conferencia Interamericana de Agricultura, Silvicultura e Industria Animal” (II); reorganización de la Sección de Cooperación Agrícola de la Unión Panamericana (III); celebración de congresos nacionales y de conferencias regionales sobre agricultura (VII y VIII); reunión de la Segunda Conferencia Interamericana de Agricultura dentro de cinco años (XII; en realidad, aplazada varias veces la propuesta segunda reunión, se verificó en el año de 1942); conveniencia de establecer una Oficina Central Experimental Panamericana dedicada al estudio de todos los aspectos de la agricultura, la silvicultura y la industria animal (XVI), proyecto realizado por fin en 1942, cuando fue creado el Instituto Interamericano de Ciencias Agrícolas (infra, Apéndice B, núms. 1 y 3); establecimiento de cuarentenas (XXVIII); adopción de un sistema uniforme de pesas y medidas en todos los trabajos que hubieran de ser objeto de cooperación interamericana para los fines de la Conferencia (XLII); formulación de bases para un proyecto de Banco panamericano de agricultura, cuyo objeto principal sería fomentar el crédito agrícola en toda la América (XLVI; para el desarrollo subsecuente de este proyecto, véase infra, núm. 2, y Apéndice B, núm. 27); utilidad de nombrar agregados agrónomos a las embajadas y legaciones en América (L).